Dos años de reinvención

Dos años de reinvención
Aquel 28 de mayo de 2012 todo empezó... Haz click y descubre las entradas especiales por el segundo aniversario del blog.

miércoles, 13 de junio de 2012

La pantera rosa que acudió a mi señal

Las panteras. Adoro las panteras. Siempre había querido acariciar una. Aunque sea un animal salvaje, me parecen tan dóciles... Sin embargo, no sabía como acercarme a ellas: no vivo en la selva.

No obstante, el destino me dio una oportunidad. Gané un concurso y me fui a una selva, no sé cuál ni dónde.  La cuestión es que intenté cumplir mi sueño, ver una pantera, pero no la vi. Huyen rápidamente en cuanto se acerca un humano.

Yo quería verlas, y no me di por vencido. Hablé con un indígena que me explicó como fabricar un llamador de panteras. Estuve noches y noches perfeccionando el llamador. El primero que hice no funcionó. Pasé unas cuantas madrugadas más en vela. El segundo también salió defectuoso. Más trabajo nocturno. Con el tercero ocurrió lo mismo.

Al cabo de casi un mes sin dormir, lo conseguí. Soplé levemente a través del instrumento y acudió a mí una pantera rosa, preciosa. La toqué, había cumplido mi deseo.

Entonces, contento, le conté mi historia a una amiga mía. Le enseñé aquel llamador y lo que me había costado conseguir que funcionara. Estaba fascinada, aunque ella me confesó que no haría lo mismo, que eran demasiadas noches en vela para algo tan insignificante como eso.

Al día siguiente, vi a aquella chica con un llamador, mientras una pantera rosa acudía a su señal. Descubrí que todo el sudor derramado era inútil. Aquella mujer había cumplido mi sueño perseguido durante mucho tiempo sin ningún esfuerzo, usando mi llamador, ése tan difícil de construir.

Me jodió mucho. Mucho. Ni siquiera le gustaban los animales.


No hay comentarios:

Publicar un comentario